Este curso tenemos la suerte de tener entre nosotros a un compañero muy dinámico y juguetón… ¡El xilófono! Este instrumento de pequeña percusión nos ofrece multitud de posibilidades en el entorno escolar: acompañamiento de canciones, actividades de improvisación, interpretación de obras instrumentales, juegos sonoros, creación de efectos en cuentos musicales, y un largo etcétera.
Con su trabajo se ponen en marcha habilidades musicales, motrices, sensoriomotoras, perceptivas… que nos ayudan a seguir aprendiendo y mejorando día a día.
La música facilita el entendimiento grupal y el crecimiento personal debido a sus características intrínsecas. A través de la educación musical, los niños aprenden, expresan y comunican distintos aspectos de la realidad exterior y de su mundo interior. Su importancia, al igual que ocurre con el resto de los lenguajes artísticos, radica en su contribución al desarrollo personal al hacer posible la expresión y comunicación de ideas, experiencias y sentimientos. Por su parte, los instrumentos musicales escolares tienen un valor pedagógico muy importante para la enseñanza musical y para desarrollar la creatividad en los alumnos y alumnas. Y es que poseen un gran valor educativo y son de gran importancia para el desarrollo de la musicalidad. El xilófono así lo manifiesta, constituyendo una gran herramienta de aprendizaje y motivación. Entre sus beneficios más destacados encontramos:
• La estimulación del sentido rítmico a través del juego.
• El favorecimiento de movimientos ágiles. El xilófono requiere agilidad y destreza.
• La mejora de la coordinación óculo-manual.
• El aumento de la capacidad de concentración.
• Es beneficioso para la memoria.
• Permite el trabajo de la paciencia.
Como vemos, este instrumento nos brinda un sinfín de destrezas positivas que no podemos perdernos. Así que… sigan los maletines de colores decorando e iluminando los pasillos del cole y propiciando un clima alegre, rítmico y musical que nos siga enriqueciendo.
¡Que no pare la música y que el xilófono no deje de sonar!