El desarrollo de la grafomotricidad es un aspecto básico de la psicomotricidad infantil y por eso es necesario potenciarla desde una edad temprana.
La grafomotricidad infantil hace referencia al movimiento que debe hacer la mano para cumplir con determinada actividad, es decir, el movimiento que el niño hace cuando escribe o dibuja. Con ella se busca mejorar la armonía tónica, la direccionalidad, la segmentación y, por tanto, se realiza para que el pequeño consiga potenciar su rapidez, la legibilidad, la armonía y la fluidez en su escritura o en los movimientos que realizan con las manos.
Es muy importante, ya que el fomento de esta actividad, basada en las habilidades motoras finas, permitirá al niño el trazo de grafías que le ayudarán a adquirir destrezas motoras que servirán de base para el desarrollo futuro de la escritura, así como para obtener un mayor dominio de su cuerpo: antebrazo, muñeca, mano y, sobre todo, dedos.
¿Cómo se adquieren las habilidades grafomotrices?
Para aprender este tipo de habilidades los niños comienzan practicando mediante el trazo libre, que les permite comprender y dominar el espacio y adquirir soltura con los utensilios básicos para, después, ir introduciendo progresivamente pautas y trazos dirigidos.
En la grafomotricidad los ejercicios de movimientos son también importantes, así se potencia el desplazamiento correcto en el espacio gráfico: trazos de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo… esta simpleza irá evolucionando a los trazados oblicuos, bucles y así hasta llegar a adquirir la imagen motriz más compleja de las letras y, posteriormente, las palabras.
Por todo lo anteriormente explicado en las aulas de 3 años de Novaschool Benalmádena venimos desarrollando desde el inicio de curso, actividades de grafismo creativo en base a cuentos y actividades más libres que les resultan mucho más atractivas a los peques, sin dejar de lado un trazo más dirigido, siendo este igual de importante para poder así interiorizar las rutinas básicas de la grafomotricidad o preescritura.
Entre otras podemos destacar las siguientes:
- Intentamos escribir nuestro nombre, en una hoja plastificada y personalizada para cada alumno, repasan el trazo de su nombre e intentan copiarlo ellos solitos, es muy difícil, pero lo intentamos.
- Nuestra mascota se llama Muna, es una linda monstruita naranja que tiene muchísimos amigos muy traviesos, después de contarnos una historia han jugado a ser invisibles y solo podemos ver su ojo. Con ayuda de nuestros rotuladores, los haremos aparecer inventándonos su aspecto.
- Ayudamos a los personajes de nuestros cuentos de las vocales, la araña Amanda llega a su casa, la iguana Irene se zampa sus insectos favoritos y al oso Octavio llegara a su árbol si le ayudamos con su letra, con macarrones, nuestro dedo o rotuladores borrables
- Después de escuchar la fábula “El ratón y el león” hacemos la red que envolvió al león y el ratón ayudo a romper con sus dientecitos. Aprendimos que todos somos importantes, hasta el más pequeñito de todos.
- Escuchamos el cuento de “La pequeña locomotora” Ayudamos a Casimira a reparar las vías del tren para que los juguetes puedan llegar a tiempo a todos los niños. Aprendemos que con esfuerzo y ayuda podemos conseguir cualquier cosa.
